sábado, 30 de julio de 2011
CINE DE VERANO
viernes, 29 de julio de 2011
JAIME
Sí, aunque pienses que no, te extraño.
Te conocí un día de principios de verano, en Madrid. Llevabas unos tejanos cortos y una camiseta blanca. Yo salía de clase y Miguel nos presentó. Yo también llevaba tejanos mal cortados, con los bordes deshilachados y camiseta de rayas. Recuerdo que fuimos a La Cruz Blanca de Alonso Martínez y nos tomamos unas cañas, y unas tapas, y luego unas copas en una terraza, y luego... luego olvidamos los apuntes en la barra de la churrería!.
Lo nuestro fue amistad a primera vista.
Tú eras especial... no todo el mundo te caía bien.
Yo era especial... no todo el mundo me caía bien.
Supongo que por eso nos caímos bien desde el principio. Teníamos el mismo sentido del humor, nos gustaban los mismos sitios, el mismo estilo de ropa, la misma comida...
Te acuerdas aquella vez que fuimos a comer al peruano aquel? En mi vida he vuelto a probar mejor cebiche, y ahora, siempre que lo como, me acuerdo de aquel pequeño restaurante y de ti.
Recuerdas cuando me llamabas a las tantas... salimos? Sí claro!!... Y aquella noche de mi corte de digestión? Qué mal lo pasamos!
Y de lo de la uña? Te acuerdas de lo de la uña? Jajaja
Y de cuando viniste a pasar unos días al campo y nos pasábamos las tardes muertas tumbados en el césped debajo del árbol enorme, acordándonos de Miguel, charlando, riendo, recordando?
Y de las tardes de domingo, tirados en el sofá, hablando por teléfono para no decirnos nada durante horas....
Y de lo mucho que me has aguantado, y de lo mucho que te he aguantado...
Y de tu casita cerca de Atocha y de aquel chico canario con quien la compartías. Qué guapo era, no? Cómo se llamaba?...
Ha llovido mucho desde entonces.
Tú dejaste Madrid, lo dejaste todo y te fuiste a Buenos Aires. Yo dejé Madrid y me fui a Valencia.
Pero nunca dejamos de ser buenos amigos. Siempre estaba el correo, y el teléfono, y las visitas, y mis promesas de acompañarte a Buenos Aires algún día.
Nunca hizo falta que nos dijéramos que estábamos ahí, porque sabíamos que estábamos. Nunca hubo reproches si no nos llamábamos en una temporada. Cuando nos reencontrábamos siempre era con una gran sonrisa y un abrazo enorme.
Y ahora no sé qué ha pasado. Tiempo. Ha pasado tiempo. Mucho tiempo. Demasiado tiempo. A mi me han pasado cosas y supongo que a ti también. Yo esperaba que esta vez también me entendieras, como siempre. No es que no quisiera llamarte, ni hablarte, ni es que no quisiera contártelo todo. Es que no podía. No quería hablar. Con nadie. Me encerré no sé por qué. Pero creía que Tú me entenderías. Tú.
No lo hiciste y me reprochaste mi silencio y mi ausencia. Y yo tampoco te supe entender...
Y ahora..... te extraño. Aunque no lo creas, te extraño mi amigo...
lunes, 25 de julio de 2011
ISLA DE UTOYA
"Me desperté. Ya no puedo dormir. Estoy sentada en el cuarto de estar. Siento dolor, rabia, felicidad, Dios, no conozco eso. Hay demasiadas emociones. Demasiados pensamientos. Tengo miedo. Reacciono al menor sonido. Quiero escribir sobre lo que pasó en Utøya. Lo que mis ojos vieron, lo que sentí, lo que hice.
Tuvimos una reunión de crisis en el edificio principal luego de las explosiones en Oslo. Después de eso, hubo una reunión para los miembros de Akershus y Oslo. Luego de las reuniones, había mucha, mucha gente alrededor y dentro del edificio principal. Nos consolamos que estábamos seguros en una isla. Nadie podía saber que también se desataría el infierno donde estábamos.
@PrableenKaur: Sigo viva.
La gente saltaba al agua y empezaba a nadar. Yo estaba echada. Decidí que si venía, me haría la muerta. No iba a correr ni a nadar. No puedo describir el miedo que se apoderó de mi mente, lo que sentí.
Un hombre vino. “Soy de la policía”. Yo estaba echada ahí. Algunos respondieron a gritos que debía probarlo. No recuerdo exactamente qué dijo, pero el homicida empezó a disparar. Cargó. Le disparó a los que estaban a mi alrededor. Yo seguía echada. Pensé: “Ahora se acabó. Está acá. Me va a disparar. Voy a morir”. La gente gritaba. Escuché que le disparaban a otros. Otros saltaban al agua. Yo estaba ahí. Agarrando mi teléfono celular en la mano, me senté encima de las piernas de una chica. Dos otras estaban a mis pies. Seguía echada ahí. El teléfono celular sonó varias veces. Yo seguía echada. Me hacía la muerta. Estuve echada por lo menos durante una hora. Estaba completamente callada. Despacio voltée la cabeza para ver si podía ver a alguien vivo. Miré alrededor. Vi sangre. Miedo. Decidí levantarme. Había estado echada encima de un cadáver. Dos cadáveres encima de mí. Tuve un ángel de la guarda.
Han pasado algunas horas desde que todo esto sucedió. Sigo conmocionada. Todo a mi alrededor se ha hundido. He visto los cadáveres de mis amigos. Varios amigos míos están desaparecidos. Me alegra saber nadar. Me alegra estar viva. Que Dios me haya cuidado. Hay tantos sentimientos, tantos pensamientos. Pienso en todos los parientes. En todos los que he perdido. En el infierno que fue y hubo en la isla. La aventura más bella del verano se transformó en la peor pesadilla de Noruega."
Prableen Kaur
"Todavía estoy en estado de shock. Acaba de llegar a casa. Me han traído desde el hotel Sundvollen. En realidad estoy todavía en shock. No he derramado ni una lágrima. No me lo puedo creer: Hoy podríamos haber sido asesinados. ¿Qué puedo decir? La última idea normal que yo tengo es que estaba en un taller de política (porque eso es lo que estamos haciendo en Utøya).
Un buen amigo se acercó y me informó sobre la explosión que tuvo lugar en Oslo. Por supuesto, había muchos que estaban preocupados. El ambiente no era bueno. Muchos pensaron que se trataba de los peores momentos de este año. Tenía un nudo en la garganta.
Nos llamaron de la administración para informarnos del suceso a todos al mismo tiempo. La mayoría tenía sus familiares en Oslo y pudo comprobar que estaban a salvo. Yo tardé bastante en localizar a mi familia. Finalmente supe que tres de ellos no estaban en la ciudad y otro estaba en el trabajo lejos del centro.
La secretaria general Helen Brenna se acercó y me habló. Me preguntaba si necesitaba a alguien con quien hablar. Entonces oímos tiros. ¿Qué diablos pasa?, pensamos.
De repente vi subir a todos los chicos, que nos decían que nos escondiéramos. Corrimos hacia el edificio principal y me encerré en el baño. Los disparos se acercaban. Yo estaba muy segura de que era una "broma", pero uno nunca puede estar seguro de nada, hoy se ha demostrado. Me las arreglé para poner el teléfono en silencio y lo guardé para no perderlo. Cuando por fin escuché las voces de algunos conocidos, salí.
Pero no había terminado. Tuvimos que correr hacia el muelle. Tropezamos con gran cantidad de arbustos y rocas de gran tamaño y caímos varias veces. Tengo muchas heridas. Matti me abrazó y me tranquilizó. Corrimos y corrimos. Lo peor fue cuando nos enteramos de que el que disparaba estaba disfrazado de policía. Maldita sea. ¿En quién debemos confiar entonces? Sin embargo, llamamos a la policía, pero no llegaban. Así que le di mi teléfono a Munir y le pedí que actualizara el Facebook para que cualquier persona con un barco nos ayudara.
Los disparos se oían más cerca. Matti dijo que teníamos que nadar. Pero ¿cómo iba a hacerlo con las botas que llevaba? Trond Agnar apareció de repente. Dijo que muchos habían tratado de nadar, pero había vuelto porque el agua estaba demasiado fría, la costa estaba demasiado lejos y era demasiado difícil. Pero ¿sabes qué? Prefería morir ahogada que por un tiro.
Lo siento. Me quité la camisa, y con el apoyo de Matti, comencé a nadar. Era pesado, así que tuve que quitarme los pantalones, también. Nadé. Matti me salvó. Él dijo lo correcto e hizo lo correcto. Cuando había nadado un tramo Matti dijo: 'Kamzy, ahora no puedes mirar hacia atrás. Debes mirar hacia adelante y pensar que la costa es tu objetivo'.
Oímos disparos todo el tiempo, y todavía estoy sorprendida de que no nos alcanzaran. Más tarde supe que él (el asesino) estaba allí y había intentado disparar contra nosotros. Un barco nos lanzó un chaleco salvavidas, pero aún cuando habíamos llegado al barco, no podía relajarme. Sentía que todavía podía dispararnos.
Algunos de los residentes locales nos ayudaron cuando llegamos a tierra. Nos dieron toallas y nos llevaron a la estación de Esso, donde la policía y el personal de la ambulancia esperaban. Yo estaba en shock. No me salió ni una sola lágrima.
La ministra de Cultura me llamó por teléfono. No sé de quién era el teléfono, era una chica que se acercó y dijo que Anniken quería hablar conmigo. Le pregunté: "¿Por qué la policía tarda tanto tiempo?" Ella estaba de acuerdo conmigo, trató de tranquilizarme, y me preguntó lo que había sucedido.
Nos dieron ropa y bebidas calientes. También llamé a mi padre. Nos llevaron al hotel Sundvollen, donde tuvimos que inscribirnos. Yo no entendía, y todavía no entiendo por qué no he derramado ni una sola lágrima. Quiero salir de este estado de shock. Porque yo todavía estoy en shock. ¿Quién hace algo así? Haciendo estallar los edificios gubernamentales en Oslo y matando a futuros políticos que se encuentran en un campamento de verano en Utøya. ¿Qué mal hemos hecho?
Aquellos que recurren a la violencia, se han quedado sin argumentos. ¿Cómo podía hacer lo que hizo que mis amigos de la AUF (juventudes del partido laborista)? Esto parece tan surrealista. No entiendo. No entiendo".
Khamshajiny Gunaratnam.
sábado, 23 de julio de 2011
RESPUESTAS SIN IMPORTANCIA
martes, 19 de julio de 2011
LA VIDA SECRETA DE LAS PALABRAS
sábado, 16 de julio de 2011
PREGUNTAS SIN IMPORTANCIA
Me acabo de tomar una copa de vino y una ensalada.
Es mediodía y hace calor... Mi cabeza flota.
Podría dormir la siesta, pero no lo haré.
Anoche dormimos poco, muy poco.
Y?
PREGUNTAS SIN IMPORTANCIA
Te conozco bien, o eso creo. Hace mucho que nos conocemos. Hemos hablado mucho, horas...días! Porque estoy segura de que si juntásemos todas las horas que hemos estado hablando, serían días sin parar.
Hemos hablado de todo, de lo divino y de lo humano, de nosotros y de los otros, de nuestras vidas, de nuestras rutinas y nuestras rarezas, de la vida y la muerte, de comida y viajes, de nada y de todo. Incluso hemos hablado en silencio.
Por eso digo que creo que te conozco bien y creo que me conoces bien.
Esta mañana pensaba que eras distinto a como te imaginé al principio, pero no, eres tal cual te imaginaba. Al principio te conocí por tus palabras, siempre serenas aunque en muchas ocasiones se adivinara tu volcán interior. Me gustaba leerte, adivinarte, y diseccionar tus letras intentando ver más allá de lo que escribías. Al principio te idealicé. Pensaba que estabas tan alto que por mucho que gritase no me ibas a oír, pero lo hacías, me oías y me sonreías, igual que ahora me escuchas y me sonríes. Y es que somos distintos, pero muy parecidos. A los dos nos gusta observar, charlar, escuchar y sonreír.
De todas formas, después de tantas horas, todavía me quedan preguntas. Son preguntas tontas, sin importancia, pero que pueden hacerme descubrir cosas tan importantes como que no te gusta la cebolla (y créeme! Esto es muy importante!).
Ahora te voy a hacer esas preguntas y cualquier día de estos, si quieres, me las contestas. Pero a mi. No escribas las respuestas, dímelas tomando un café con copa en la plaza, o comiendo un helado sentados en las escaleras del jardín.
Son unas cuantas preguntas, pero algunas me las sé, así que ya las contesto yo por ti.
1. ¿Qué hora es?:
2. Nombre: ..... me lo sé.
3. Tu cumpleaños: También me lo sé... ya te dije que los que nacen ese día lo hacen con un don.
4. Cantidad de velas que apareció en tu última tarta de cumpleaños: creo que no tuviste tarta, así que para tu próximo cumpleaños yo te haré una.
5. Signo del zodiaco: Capricornio.
6. Tatuajes: Ninguno.
7. Color de ojos: Según la luz, pero verdes.
8. ¿Cuánto mides?: Lo suficiente...(debería especificar más esta pregunta??)
9. Parte de tu cuerpo que te gusta más:
10. Parte que te guste menos:
11. Estación favorita del año:
12. ¿Bebes?: Moderadamente.
13. ¿Fumas?: Si.
14. ¿Quisiste tanto a alguien como para llorar?:
15. ¿Alguien ocupa tu corazón actualmente?: Ni se te ocurra decir que no!!!
16. ¿Crees en el amor para toda la vida?:
17. Tres cualidades principales en tu pareja ideal:
18. ¿Has tenido alguna vez un accidente de coche?:
19. ¿Café o Té?: Café
20. ¿Vaso mitad lleno o mitad vacío?: A medias
21. ¿Amigos especiales?:
22. ¿Amor platónico?:
23. El día más feliz de tu vida:
24. El día más triste de tu vida:
25. El mayor error que hayas cometido: Da igual, ya pasó y además creo que es el mismo que el que yo cometí.
26. Una fecha para recordar y por qué:
27. ¿Extrañas a alguien?:
28. Una frase que te guste:
29. ¿Qué cambiarías de tu vida?:
30. ¿Qué dejarías como está?:
31. ¿Cuántos timbrazos antes de descolgar el teléfono?:
32. Una película:
33. Un libro:
34. Una canción:
35. Aroma preferido:
36. Peor sentimiento del mundo:
37. Mejor sentimiento del mundo:
38. Lo primero que piensas cuando te levantas:
39. ¿Cómo te gusta que te besen?: Con sinceridad.
40. ¿Y en qué lugar prefieres?:
41. ¿Has estado en otro continente?:
42. ¿Montaña o Playa?: Playa
43. Última ciudad que hayas visitado: Almagro, creo.
44. Color de ropa interior favorita:
45. Flor:
46. Número favorito:
47. Tema de conversación más detestado:
48. Tema de conversación preferido:
49. Comida favorita: El pescado, la italiana.
50. Bebida favorita:
51. ¿Dónde y cómo te ves en 10 años?:
52. ¿Qué harías si te tocase la lotería?:
53. ¿Hay algo que quieras decir a alguien, pero no te atreves?:
54. ¿Tienes alguna manía?:
55. ¿Supersticioso?:
56. Di tus cualidades con tres adjetivos:
57. Tres defectos:
58. ¿Alguna promesa por cumplir?
59. Si pudieras ser otra persona, ¿quién serias?:
60. Deporte favorito: Fútbol.
61. Tímido o extrovertido: Más tímido que extrovertido.
62. Una palabra que te encante decir:
63. Lugar preferido:
64. ¿Conformista o inconformista?:
65. ¿Cuándo fue tu última visita al hospital?:
66. ¿Te gusta conducir?: Muchísimo...
67. ¿Cuántas veces suspendiste tu examen de conducir?:
68. ¿Dulce o salado?:
69. ¿Qué hora es?:
Tenemos que seguir hablando..... me parece increíble no saber algunas de estas respuestas... todavía. Y lo peor (lo mejor), es que todavía se me ocurren muchas más...
Por mucho que hablemos... nunca será suficiente, y ojalá así sea siempre...